sábado, 20 de diciembre de 2008

posdata

Todo comenzó cuando salía de la casa de mi amiga y decidí tomar un taxi, porque era tarde a la madrugada y no me sentía muy segura de viajar sola. Debía llamar a mi novio cuando esté llegando a destino para que me espere.
Venía un taxi que asomaba de una callecita en diagonal y me hizo juego de luces cuando notó que yo esperaba un auto.
Me despedí de mi amiga y subí al auto. Le dije de la dirección y me preguntó acerca del tránsito, y no nos poníamos de acuerdo acerca de qué camino tomar.
El viaje se pasó volando y el conductor demostró interés en establecer una charla. Pude notar que tenía un carácter fuerte por su manera de expresarse. Calculo que era un hombre grande, mencionó tener dos hijos, un contador y una hija de 20 años.
Yo lo miraba conversar, pero a la vez lo deseaba. Tan sumergida venía en mis pensamientos -viendo que gesticulaba al hablar, pero escuchándolo sólo por momentos-, que me quedé pasmada cuando el tachero, parando en la esquina de mi casa, me preguntaba: -¿Qué quiere hacer?, (me lo preguntó 2 veces, recién a la segunda reaccioné).
En esos segundos se me cruzó la idea de decirle de ir a tomar un café. Y le respondí:
-Cómo que quiero hacer?.
- Sí, se baja acá? A dónde va?
-A mitad de cuadra, respondí.
Mi silencio se hizo sentir, le pagué, me bajé rápido y no le dije siquiera adiós.
Después de haber caminado unos metros, recordé que tenía que llamar a mi novio, pero era tarde, ya casi estaba en la puerta.
Me quedé con ganas de conocer a ese hombre, me atrajo mucho.


Existe el amor a primera vista?
Hay edad para el amor?

No hay comentarios: